domingo, 15 de mayo de 2011

"I Campaña de sensibilización sobre el pueblo gitano. Diversidad en el mundo gitano".

Durante esta sesión, fueron las compañeras Tania Moreno, Miriam Muñoz, Jéssica Ocaña y Yolanda Pérez, las encargadas de desarrollar una ponencia acerca del colectivo gitano y su importancia como minoría cultural en España, que titularon “Diversidad en el mundo gitano”. Con ella, las compañeras pretenden hacernos ver la verdadera realidad a la que se enfrenta este colectivo, sensibilizarnos con él gracias al análisis de su cultura y características, a la identificación de los factores de riesgo que dificultan su integración y el diseño de la intervención que sería más eficaz para lograr por fin su integración, un objetivo perseguido desde hace tiempo. Todo esto, se desarrolló a través de la resolución de una serie de preguntas marcadas en un díptico que ellas mismas nos facilitaron.


A modo de inicio, las compañeras realizaron una pequeña dinámica para comprobar la percepción general que teníamos sobre este colectivo y los estereotipos presentes en ella. Una vez descubrimos los prejuicios existentes en nuestras afirmaciones, como el hecho de que considerásemos a todos los gitanos por igual, las compañeras nos ayudaron a desmantelarlos y ver cómo éste en realidad es un colectivo heterogéneo, al igual que el resto de la sociedad. En relación a tales prejuicios, anexaré a continuación el enlace de un artículo, en el que se denuncian las agresiones realizadas contra este pueblo en base a los mismos

http://www.europapress.es/epsocial/noticia-osce-critica-inaceptable-violencia-contra-gitanos-varios-incidentes-hungria-republica-checa-20110506145835.html


Tras esto, la exposición se centró en la explicación de la trayectoria histórica de este pueblo, con la que comprendimos el por qué de algunos aspectos de su cultura y forma de entender la vida. Así, vemos que los gitanos proceden en realidad de la India, y no fue hasta el s.XIV que llegaron a la Península Ibérica, donde a pesar de tener una buena integración al principio, pronto sufrieron la discriminación y persecución por parte de las autoridades. Esta cruzada contra los gitanos y su cultura, comenzó con la “Ley de Medina del Campo” dictada por los Reyes Católicos en 1449, que obligaba a los mismos a olvidar su tradición nómada para asentarse en un territorio y desarrollar un trabajo fijo. Al igual que ocurrió con otras minorías también perseguidas, como la judía o la musulmana, ésta sufrió también una fuerte desadaptación, que no mejoró hasta el paso de varios siglos.

A pesar de la citada mejora, producida con el asentamiento de los miembros de este colectivo en posiciones sociales más acomodadas, relacionadas con el trabajo en la agricultura y ganadería, su situación volvió a empeorar con la Revolución Industrial, tras la cual volvieron a ser segregados del resto de la sociedad y sus derechos se vieron mermados.

Una vez vistas las características histórica, las compañeras pasaron a reseñar otro de los aspectos que más ha marcado el devenir de este colectivo, su cultura. De ella, se destaca la existencia de dos tipos de clanes familiares, los canasteros y los caseros, en función de su decisión de emigrar constantemente o asentarse en un territorio e integrarse de forma definitiva, respectivamente.

Además de lo anterior, vemos que la familia desempeña un fuerte papel como institución socializadora y provisora del orden social, y tiene sus características propias. Dentro de tales características encontramos que el modelo típico es el de familia extensa, así como que ésta se organiza en función del sexo, (la posición de la mujer es inferior a la del hombre), y la edad, (es una obligación respetar a las personas mayores) .

Como comentario personal a esta forma de organización familiar, destacar que no es la primera vez que observamos esta desigualdad de género en los roles desempeñados por hombres y mujeres en la familia. Por tanto, vemos que esta desigualdad es un problema que no entiende de colectivos, a pesar de que deriva de la cultura, y que en este caso también requiere de la misma intervención. Esta lucha por la igualdad, puede ser usada en mi opinión como un nexo de unión de este colectivo y el resto de la sociedad, en base al cual se puede construir un modelo común de género, en el que basar la familia que verdaderamente queremos.

Así mismo, creo que el resto de la sociedad podríamos aprender algunos valores de la cultura gitana como la atención y el respeto a los mayores, procurando su integración en el núcleo familiar y el entorno que le rodea.

En relación a lo anterior, expondré ahora un vídeo relacionado con la ponencia realizada por Tamara Carrasco, “Mujer gitana participando”, en el que se explican las mayores dificultades a las que éstas se enfrentan y cómo, a pesar de todo, las solventan adaptándose a esta sociedad y progresando en ella. Son mujeres del s.XXI.




Siguiendo con las características de la familia gitana, las compañeras expresaron algunos de los roles más representativos que hay dentro de la misma, como el de “vara” u hombre que sirve como recurso para sacar adelante a la misma, o el de “tía”, referente a las mujeres mayores con una vida ejemplar. En relación a esto, creo preciso destacar que el supuesto rol de “patriarca”, es según nuestras compañeras una invención de las personas ajenas a este colectivo, utilizada para plasmar más estereotipos y prejuicios sobre el mismo.

Como otro aspecto de la cultura gitana, destacamos su forma de entender las relaciones sociales y la importancia que le dan a los lazos establecidos, ya sean vecinales, comunales o de otro tipo. Esto, puede ser utilizado en mi opinión, como un buen punto de apoyo desde el que reforzar la integración del colectivo, ya que el hecho de mantener estables los lazos que crean, les propicia una buena red de apoyo social.


Como conclusión a las ideas anteriores, lo que obtengo es que el pueblo gitano es una importante minoría étnica, con una cultura muy arraigada, de la que como educadores podemos valernos para trabajar el proceso de integración social desde “los dos lados de la mesa”. Con la anterior frase, quiero hacer referencia a la necesidad no sólo de intervenir con la comunidad gitana, sino también con el resto de la población, como se propusieron las compañeras. Gracias a dicha intervención, evitaríamos que la sociedad actúe como elemento excluyente de esta comunidad y comience a elaborar iniciativas propias, que pretendan este fin.

De la mano de la anterior proposición, me gustaría centrarme ahora en las principales líneas de intervención que creo se deben seguir con este colectivo, teniendo en cuenta que dentro del mismo como afirma J.M.Fresno, existen varios subgrupos con características propias.

Al respecto, personalmente creo que deben existir una serie de intervenciones socioeducativas generalizadas a toda la comunidad gitana, más centrada por ejemplo en el logro de una mayor incorporación al mercado laboral o en la finalización de los estudios secundarios por parte de la juventud, y luego, una intervención específica con un subgrupo que supone al menos el 5% del total, que se corresponde con la población gitana que subsiste en condiciones de marginalidad, como ocurre en el caso del asentamiento chabolista “El Vacie”.

Relacionada con esa intervención específica con personas en situación de marginalidad, se encuentran las bases de la propuesta que recogí en el primer cuatrimestre, en la entrada “Jornadas de sensibilización sobre el asentamiento chabolista El Vacie”. En base a éstas, propongo como principal actuación, la reeducación de las personas afectadas en vistas a su inserción progresiva en la sociedad, a través de una política de realojamiento que permita la creación de barrios tramados, interconectados. Con esta reeducación, centrada por ejemplo en la adquisición de buenos hábitos de higiene o el abandono de conductas disociales, así como con el trabajo sobre la formación profesional de la persona y su posterior incorporación laboral, sentamos las bases para que ésta pueda luego acceder a una vivienda pública e integrarse en una comunidad normalizada.

Sin duda, creo que la principal política social que se puede hacer en los casos de marginalidad, son de corte urbanístico. Así, en vez de optar por un modelo urbano segregacionista, si optamos por un modelo tramado, que permita la integración de la persona en un entorno normalizado, no estaremos provocando inconscientemente la marginalización de la misma. Además, con este tipo de intervención alcanzaríamos también objetivos relacionados con la interculturalidad, algo que hasta hace poco se ha trabajado con esta población.

Relacionada con esa intervención específica con personas en situación de marginalidad, se encuentran las bases de la propuesta que recogí en el primer cuatrimestre, en la entrada “Jornadas de sensibilización sobre el asentamiento chabolista El Vacie”. En base a éstas, propongo como principal actuación, la reeducación de las personas afectadas en vistas a su inserción progresiva en la sociedad, a través de una política de realojamiento que permita la creación de barrios tramados, interconectados. Con esta reeducación, centrada por ejemplo en la adquisición de buenos hábitos de higiene o el abandono de conductas disociales, así como con el trabajo sobre la formación profesional de la persona y su posterior incorporación laboral, sentamos las bases para que ésta pueda luego acceder a una vivienda pública e integrarse en una comunidad normalizada.

Sin duda, creo que la principal política social que se puede hacer en los casos de marginalidad, son de corte urbanístico. Así, en vez de optar por un modelo urbano segregacionista, si optamos por un modelo tramado, que permita la integración de la persona en un entorno normalizado, no estaremos provocando inconscientemente la marginalización de la misma. Además, con este tipo de intervención alcanzaríamos también objetivos relacionados con la interculturalidad, algo que hasta hace poco se ha trabajado con esta población.

A pesar de lo positivo que creo que es la opción descrita, reconozco que es difícil de implementar, tanto por la falta de recursos, como de la visión necesaria para hacerlo en muchas ocasiones. Es ante este último obstáculo, donde para mí el educador social jugaría un papel fundamental en el trabajo con el pueblo gitano, proponiendo nuevas metas y nuevas formas de alcanzarlas, sin que el trabajo se vea perjudicado por la simple falta de medios materiales o la existencia de estereotipos interiorizados incluso en la propia población. En relación a esto último, podemos hablar al igual que en ocasiones anteriores, de la importancia del educador para ayudar a "desaprender lo aprendido" y adoptar una nueva visión ante las cosas.


Finalmente, me gustaría concluir que a pesar de la lentitud de los progresos, cada vez es más común la integración del colectivo gitano en nuestras sociedades, como las propias compañeras nos demostraron. Esto, debe servirnos de incentivo para seguir trabajando por terminar de cumplir un objetivo, que aún está a medias.


A continuación os dejo algunos enlaces. Gracias por todo y un saludo.

http://docs.google.com/viewer?a=v&q=cache:8jr7-Y0b9YQJ:aecgit.pangea.org/pdf/27jornadas/EXPERIENCIA_Gitanos_Rumanos_ASOC_GITANA_BURGOS.pdf+intervencion+con+gitanos&hl=es&gl=es&pid=bl&srcid=ADGEESgHzQ9nI5_ytUMMuIdlgbwyHik9XptxzI-Y8uWN6uYIvoiDhuunRviNN_1o8DB4u4qM5YSiyFjzUMQmXkU3gLBp6Ob3qHLjDOcaa6r2MuPN_K3njsMt_O7y_ERUi4GqbBMVYlI6&sig=AHIEtbQPd86fZFd7bWckQL6WFflhshTH2A&pli=1

http://docs.google.com/viewer?a=v&q=cache:XvPFfNfB5LkJ:www.caritas-zaragoza.org/biblio/ficheros/0008544001283104099.pdf+intervencion+con+gitanos&hl=es&gl=es&pid=bl&srcid=ADGEEShYyf9gBdaPSi_YNMAwF2mA1XKLjhLRslT8W_Y8qeAgZehm91W8D3YppMabXN1Vo0xut1adeTaux2LOIQpzjrVeD_RxWqesyaGzMgymBWZfZOitP5vKxomQyLrHshHakvtL40du&sig=AHIEtbThYfLCTJWAIz-YrLyvRWSLfj7Iyg

http://www.sevilla.org/ayuntamiento/delegaciones/bienestar-social-1/actividades/jornada-sobre-el-asentamiento-chabolista-el-vacie-en-la-finca-la-albarrana-del-parque-miraflores

http://artegitano.blogspot.com/

1 comentario:

  1. Aunque creo que la entrada no está mal, me gustaría completarla aún más, sobre todo en lo relacionado con la intervención educativa que puede realizarse con el colectivo. Esto, se debe a que tras cerrar la entrada, en la que me he centrado en una intervención dedicada a la reeducación e integración en la comunidad, especialmente de las personas gitanas que viven en condiciones marginales, he ido desarrollando nuevas ideas sobre una intervención mucho más generalizada que puede hacerse con el colectivo.

    Dichas ideas, las desarrollaré en una entrada alternativa, que pienso exponer cuando termine de recabar información al respecto.

    Espero que mi idea os agrade. Un saludo y gracias.

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